El pasado 28 de agosto, la parroquia San Agustín celebró con gran fervor la solemnidad de su patrono, una figura emblemática de la fe católica y doctor de la Iglesia. La conmemoración comenzó con una emotiva procesión que recorrió las calles de la parroquia, donde la imagen de San Agustín fue llevada con devoción por los feligreses, simbolizando la unidad y el compromiso de la comunidad cristiana.
La procesión culminó en el templo parroquial, donde se celebró una Eucaristía solemne presidida por Monseñor Ángel Francisco Caraballo, Obispo de la Diócesis de Cabimas. Durante la ceremonia, el Obispo destacó la vida y legado de San Agustín, resaltando su búsqueda de la verdad y su profunda contribución a la teología cristiana. «San Agustín nos invita a reflexionar sobre nuestra propia vida de fe y a buscar siempre la luz del entendimiento en nuestras decisiones diarias», expresó Monseñor Caraballo en su homilía.
La comunidad parroquial mostró una activa participación, con la asistencia de numerosos fieles que se unieron en oración y canto, creando un ambiente de alegría y espiritualidad. La celebración incluyó momentos de reflexión y un sentido homenaje a la influencia de San Agustín en la vida de los católicos, resaltando su mensaje de amor, compasión y búsqueda de Dios.
La solemnidad de San Agustín no solo es un recordatorio de su vida y enseñanzas, sino también una oportunidad para que los miembros de la comunidad se reafirmen en su fe y en la práctica de los valores cristianos que él promovió.